Con el desafío de que los niños y jóvenes se enamoren de Cristo, lo conozcan y tengan una experiencia espiritual que los mantenga cada vez más motivados y convencidos de la fe que profesan, la parroquia eclesiástica Santísima Trinidad de Pirineos dio inicio el pasado 4 de octubre al año formativo de catequesis de primera comunión y confirmación.

Así lo dio a conocer el vicario parroquial, presbítero Jean Carlos Medina Poveda, encargado de la labor catequética de esta circunscripción de la Diócesis de San Cristóbal, quien indicó que en total son 178 niños y jóvenes que emprenden este caminar para prepararse y recibir los sacramentos de iniciación cristiana, acercarse a Dios y fortalecer su fe.

Comentó el padre Medina Poveda que este año cuentan con un equipo de 27 catequistas, todos miembros de grupos de apostolado de la comunidad parroquial que se han sumado para acompañar y formar a los niños. Añadió que se trabaja también con un grupo de jóvenes y adultos que tienen el interés de prepararse para tener una vivencia más directa con el Señor, de conocer más a Dios a través de la palabra y por eso se les brinda un espacio para favorecer ese acercamiento con el Creador.

Un dato particular, comentó el Presbítero, es que gracias a un equipo de expertos en pedagogía y metodología, y acompañados por el párroco, presbítero Miguel Duque, se está elaborando un catecismo para los diferentes niveles, de manera que cada catequesis está sustentada en un tema formativo apoyado en la Sagrada Escritura, propiciando momentos de reflexión y diálogo que favorecen el aprendizaje y hacen más atractivo el proceso de formación.

En consonancia con el propósito de inspirar una fe sólida, labor de la catequesis se seguirá complementando con la Escuela para Padres, la cual estará dirigida por los hermanos de la Renovación Carismática Católica.

El Presbítero apuntó que una vez más han recibido el apoyo de la Dirección del Liceo Pellín, que ha facilitado el uso de diez aulas para impartir clases, de manera que se tendrá actividad catequética en el liceo y en la Parroquia. Para finalizar, ratificó la intención del trabajo pastoral:

“Si bien es fundamental dominar aspectos doctrinarios, como conceptos y oraciones, es muy importante la formación vivencial, que podamos dar testimonio de Cristo con nuestra vida, porque Él es el camino, la verdad y la vida».

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✍️ Por Ana Leticia Zambrano.